“Queremos transportarte a un país sin salir de tu ciudad”, Emilio de la Peña (Siente El Mundo)
En acens Podcast tuvimos el placer de conversar con Emilio de la Peña, director y creador de Siente El Mundo, un proyecto innovador que combina tecnología, turismo y experiencias sensoriales. Emilio compartió su visión, aprendizajes y cómo este sueño se ha transformado en una realidad que impacta la manera en que las personas experimentan culturas y países sin salir de su ciudad: “Queremos crear una experiencia que te haga sentir un país a través de los sentidos”.
Un emprendedor apasionado por las experiencias
Emilio, un apasionado por el marketing experiencial, estudió inicialmente nutrición, lo que le permitió entender profundamente a las personas. Sin embargo, su amor por el marketing lo llevó a redirigir su carrera: “Recomendación, no se pongan la etiqueta de lo que estudiaron. Al final, la vida es probar cosas nuevas y desaprender lo que no funciona”, reflexiona Emilio.
Con una experiencia rica en diferentes sectores, desde bienes raíces hasta automóviles, Emilio encontró su verdadera vocación en crear algo único: una experiencia integral que permitiera a las personas ‘viajar’ sin tener que tomar un avión.
¿Qué es Siente El Mundo?
Siente El Mundo comenzó como un blog de viajes, pero rápidamente evolucionó hacia un concepto mucho más inmersivo. Basándose en el marketing experiencial, Emilio y su equipo desarrollaron simuladores que combinan servomotores, videos 4D y efectos sensoriales como olores y sonidos. Estas experiencias recrean la sensación de estar en lugares icónicos de México, transportando a los participantes a través de los sentidos: “Al final, sentir es la esencia de las experiencias humanas. Queremos que las personas vivan algo tan impactante que les inspire a visitar el país real”.
Innovación tecnológica y el poder de los sentidos
El proyecto utiliza tecnología de vanguardia, incluyendo programación en Python, sistemas inteligentes de movimiento y colaboración con instituciones académicas como la Universidad Politécnica de Valencia. El objetivo es crear experiencias que trasciendan el entretenimiento y generen un impacto emocional duradero: “No somos un cine; somos una herramienta para que los sueños de viajar se vuelvan realidad”.
Además, el equipo está trabajando en estudios de Neuromarketing para optimizar sus experiencias y captar mejor las emociones de los participantes. Esto incluye mediciones de sudoración, rastreo ocular (eye-tracking) y análisis cerebrales.
Los retos y aprendizajes del camino
El camino no ha sido fácil. Emilio compartió cómo la pandemia casi arruina el proyecto en sus inicios, pero esto lo motivó a reinventarse y buscar colaboraciones estratégicas. Actualmente, Siente El Mundo opera en Valencia, España, validando su modelo de negocio en uno de los mercados turísticos más relevantes para México.
En tres meses, han recibido a más de 1.000 personas, generando reseñas sobresalientes con una calificación promedio de 4,9 estrellas. Sin embargo, Emilio enfatizó que el reto más grande es expandir su oferta de experiencias: “Estamos aprendiendo que nuestro cliente no regresa hasta que tenemos algo nuevo que ofrecer. Esto nos impulsa a innovar constantemente”.
Un modelo de impacto global
Siente El Mundo no solo busca recrear lugares, sino también conectar profundamente a las personas con culturas y tradiciones. Desde degustaciones gastronómicas hasta actividades interactivas, cada detalle está diseñado para ofrecer autenticidad y valor. El modelo de negocio también destaca por su colaboración con gobiernos y marcas locales, que financian parte de las acciones y permiten a Emilio mantener precios accesibles: “Nosotros cobramos 10 € por una experiencia que incluye degustaciones, premios y un descuento en nuestra tienda de productos mexicanos. Queremos que todos puedan vivirlo”.
Proyecciones y visión a futuro
En palabras de Emilio, el objetivo es ambicioso: “Queremos tener 1,000 simuladores y grabar experiencias de al menos 40 países en los próximos 10 años”. Además, ya están explorando la posibilidad de franquiciar el modelo y expandirse a otras ciudades como Madrid y Barcelona. La clave será mantener la esencia del proyecto: transmitir la pasión por los destinos que representan.
Reflexión final
Durante la charla, Emilio dejó una enseñanza poderosa: “Hay que descubrir qué te apasiona y eso se logra fracasando con lo que no te apasiona. Dense la oportunidad de ser malos, hasta ser buenos”. El proyecto Siente El Mundo es un recordatorio de cómo la innovación, la perseverancia y la empatía pueden crear algo único. Si quieres saber más, visita sus páginas en Instagram:
Con historias como estas, queda claro que los sueños se construyen paso a paso. Siente El Mundo es más que una experiencia: es una invitación a redescubrir la magia de viajar, empezando desde el corazón.
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