“La idea del Grado LEINN es que tratemos de probar todo lo posible”, Valentina Mas Villalba
Nacida en Venezuela, en 2018 Valentina se mudó con su familia a España y se tomó un año sabático para explorar posibilidades. Estuvo en Irlanda y Malta: “Fue un momento tanto de conocerme a mí misma, empezar a saber qué es lo que me gustaba realmente, como de aprovechar la oportunidad para aprender sobre algo distinto. Apliqué a la Universidad y entré en el Grado LEINN”.
En LEINN se penaliza la no acción y se aplaude el error: “La idea del grado es que nos expongamos al máximo y que tratemos de probar todo lo posible, ya que realmente no tenemos nada que perder y estamos cubiertos por la Asociación Junior Empresa. Mientras sea legal tenemos la oportunidad de explorar todo lo que queramos y no quedarnos de forma estática, que es lo que nos diferencia de otros grados más tradicionales”. Para ello cuentan con Coaches y asesores legales y fiscales, que les orientan a través de su experiencia en el emprendimiento. Para evaluarles usan indicadores clave de rendimiento (KPI), como los económicos (facturación y beneficios), aprendizajes, visitas a clientes y Soft Skills (Habilidades Blandas que miden la actitud).
“LEINN es Liderazgo, Emprendimiento e Innovación, es un grado bastante particular, ya que la primera semana cuando entramos creamos una empresa en grupos de 20 personas. Esta empresa es como el paraguas tanto fiscal como legal de todos los proyectos que tenemos que desarrollar al año para ir pasando de curso”, señala Valentina. En su grupo han creado Mate Projects, y ella está en el proyecto de Starters Bootcamp, un campamento de emprendimiento para chicos de entre 14-18 años, que promueve el desarrollo de habilidades personales y la resolución de problemas en equipo: “La idea es, a través del Employer Branding, que distintas empresas apoyen esta iniciativa y ayuden con becas tanto a hijos de empleados como a jóvenes con pocos recursos”. Precisamente acens apoyó en 2019 esta iniciativa al ofrecer becas mediante las cuales 6 hijos de empleados pudieron asistir en verano al Starters Bootcamp.
Además, cada año los alumnos tienen que viajar al extranjero. Valentina fue primero a Finlandia y actualmente está en Corea del Sur. “Me encargo tanto de la captación, como de todo el tema de Marketing y de las comunicaciones con distintas empresas”, cuenta Valentina: “Lo que más utilizamos es LinkedIn, es la plataforma que nos ha permitido llegar a más gente de manera online”.
Para compaginarse con los distintos husos horarios, Valentina dedica las mañanas a conocer el mercado tecnológico en Corea del Sur y hacer nuevas conexiones, y las tardes a los proyectos que tengan relación con España: “Tenemos un Co-Work en el Innovation Park de Seúl, venimos aquí todos los días a trabajar hasta que se nos hace de noche y ya seguimos en casa”. Corea es uno de los países punteros en tecnología, como está descubriendo Valentina: “En este momento van mucho más delante de lo que estamos nosotros, por ejemplo en las tiendas inteligentes, que en España se ven muy poco, aquí se utiliza de manera normal”. Sin embargo es un país donde se habla poco el inglés: “Terminamos hablando por Google Translator o por señas. De hecho a las reuniones tenemos que ir con un intérprete, porque si no, no están tan abiertos a negociar”. Para poder llegar a acuerdos hacen falta muchas reuniones previas y ganarse la confianza: “El baremo para decir que ya tienes el nivel de confianza adecuado es que te inviten a su casa. Cuesta bastante llegar a ese nivel, pero una vez que consigues una persona de confianza te abren muchas puertas”.
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